Si te estás preguntando cuáles son las contraindicaciones de la marcha nórdica has llegado al sitio adecuado. En este artículo te hablaremos desde nuestra experiencia y la de nuestros alumnos. En ningún caso pretende sustituir la visión de un profesional médico y, en caso de dudas, siempre te aconsejaremos consultarle.
«Si puedes andar, puedes practicar marcha nórdica»
Seguro que has empezado a interesarte por la marcha nórdica porque has oído los numerosos beneficios que tiene pero lo primero que te viene a la cabeza es esa antigua lesión de rodilla o la lesión en el hombro. ¿Será bueno para mí practicar marcha nórdica o empeorará mi lesión?
Una de las cualidades de la marcha nórdica es su alta versatilidad: cualquier persona que practique marcha nórdica puede adaptar en cada momento el entrenamiento a sus necesidades y nivel de exigencia, porque puede trabajarse a diferentes amplitudes e intensidades.
¿Qué pasa si tengo una lesión?
Es habitual que las personas que comienzan a practicar marcha nórdica procedan de otros deportes que han tenido que dejar por alguna lesión o lo utilicen como rehabilitación después de alguna operación o por sugerencia de su médico como actividad física saludable. En estos casos son los profesionales sanitarios los que establecen las pautas y son ellos los que le indican al alumno lo que debe o no debe hacer. Así nos lo hacen llegar y nosotros adaptamos el entrenamiento a cada caso.
Nos encontramos entonces con reducción de movilidad en el tren inferior (fascitis, problemas de rodilla, operaciones de cadera, esguinces) y en el tren superior (lumbalgia, problemas en hombros, en codos, artrosis) y debilidad en articulaciones y músculos en general.
El uso correcto del bastón de marcha nórdica reduce notablemente el impacto en las articulaciones inferiores distribuyendo el peso por todo el cuerpo y reduciendo la tensión en la zona lesionada, mejora el equilibrio y la estabilidad con el apoyo adicional, activa el tren superior fortaleciéndolo y contribuyendo en el desplazamiento y aumenta el rango de movimiento de las articulaciones produciendo un estiramiento dinámico.
¿Qué pasa si tengo algo no controlado?
Ante un problema cardíaco no controlado, una enfermedad respiratoria severa, hipertensión no controlada, problemas de equilibrio o neurológicos, dolor crónico, fatiga y problemas de salud agudos no controlados se debe consultar al médico para la realización de cualquier actividad deportiva. El instructor de marcha nórdica debe adaptar el entrenamiento siguiendo las indicaciones del profesional médico.
¿Cuáles son las contraindicaciones de la marcha nórdica?
La marcha nórdica es un entrenamiento de bajo impacto que requiere conocer y aplicar una técnica concreta. Está comprobado que el método de enseñanza ALFA 247 es muy efectivo y tiene muchas herramientas para conseguir transmitir al alumno la técnica correcta para que éste pueda adaptarla a sus objetivos y necesidades.
Antes de comenzar a practicar marcha nórdica, especialmente si se tiene alguna condición de salud, es recomendable:
- Consultar a un profesional sanitario.
- Contactar con un instructor certificado por la ENWA.
- Adaptar el entrenamiento a la situación de cada alumno.
Por tanto, la marcha nórdica no tiene ninguna contraindicación si se aprende y aplica la técnica correctamente.
Por eso insistimos en que contactes con un Instructor certificado que te garantizará un aprendizaje adecuado.