Esta ruta se desarrolla entre los términos municipales de Galapagar y El Escorial.
En esta ruta de marcha nórdica caminaremos por un nuevo tramo de la Cañada Real Segoviana, de la que ya hemos nordiqueado algún trecho.
Empezamos esta ruta en una de las calles de la Colonia España, que da al Paseo de la Cañada.
A los pocos metros, subimos por un puente que atraviesa las vías del tren y que nos saca de la zona urbana, siguiendo una pista que dejamos enseguida para tomar a la izquierda otra, un poco más estrecha y que nos lleva directamente a la Ermita del Cerrillo.
Ermita del Cerrillo
Desde ahí, avanzamos por el llamado Cordel de las Suertes Nuevas, que es el nombre que recibe este tramo de la ancha cañada y que por una pista situada al margen derecho y bastante asequible para practicar una buena técnica de marcha nórdica, nos deja al borde de una calle de dos sentidos que tenemos que cruzar con precaución.
Entramos en el parking del embalse y continuamos hacia abajo hasta llegar al límite del agua e intentar adivinar, si hace un día despejado, el final del embalse de Valmayor, uno de los grandes suministros de agua de la Comunidad de Madrid.
Embalse de Valmayor
Volvemos por una senda hacia el parking y cruzamos nuevamente, con mucha precaución, la calle para volver por la pista de bajada hasta coger un pequeño desvío hacia la izquierda.
Ahora subimos por la margen izquierda de la cañada y en un punto determinado, giramos más a la izquierda en dirección a Navalquejigo, caminando por un sendero más estrecho y rodeado de jaras, retama y pequeñas encinas que nos deja en la zona del Conjuro con sus paisajes típicos de dehesa.
Paisaje de dehesa
Al pasar una puerta giramos a la derecha casi 180º e iniciamos un camino de subida un poco más pronunciada, hacia la Ermita.
Puerta
Al llegar a la explanada de la Ermita del Cerrillo, nos dirigimos, nuevamente, hacia el puente que nos dejará en el punto de inicio.
Puente sobre las vías del tren